La seguridad eléctrica es un pilar fundamental en la gestión de instalaciones eléctricas, tanto en baja como en media tensión, y tanto para los ocupantes como para el personal técnico que las opera y mantiene.
Pero ¿sabemos qué está pasando en la instalación en todo momento? Y más importante aún, ¿cómo predecir y prevenir eventuales incidentes que puedan suponer un riesgo para personas, equipos o para la propia instalación?
En este artículo te explicamos los riesgos y elementos clave para proteger tu instalación y a las personas que la operan.
¿Qué es la seguridad eléctrica?
En su esencia, la seguridad eléctrica se refiere a un conjunto de prácticas y medidas diseñadas para mitigar los riesgos eléctricos y prevenir sus efectos en caso de incidentes en una instalación eléctrica. Estos riesgos pueden variar desde simples contactos eléctricos hasta situaciones más peligrosas como explosiones o incendios, que pueden afectar tanto a personas como a los activos dentro de una instalación.
La importancia de la seguridad eléctrica no debe subestimarse, ya que el incumplimiento de las prácticas de seguridad puede resultar en accidentes, algunos de ellos graves o fatales. Por lo tanto, es esencial tener una comprensión sólida de la seguridad eléctrica y cómo aplicarla correctamente en diferentes de situaciones.
Para comprender mejor la seguridad eléctrica, podemos dividirla en dos categorías en función de su aplicación: protección pasiva y protección activa. Ambas formas de protección son fundamentales para garantizar la seguridad eléctrica en una instalación.
La protección pasiva se refiere a métodos que previenen o dificultan que las personas sufran lesiones eléctricas en una instalación sin que ningún dispositivo entre en funcionamiento. Ejemplos de protección pasiva incluyen el cumplimiento de normas y regulaciones específicas, como la IEC 61439, que establece estándares de seguridad para cuadros eléctricos. Además, la compartimentación en cuadros eléctricos es una estrategia efectiva que limita el acceso a partes peligrosas.
Por otro lado, la protección activa implica dispositivos y mecanismos que entran en acción cuando detectan un comportamiento eléctrico anómalo y potencialmente peligroso en la red eléctrica. Ejemplos de protección activa incluyen interruptores automáticos y fusibles, que son esenciales para prevenir cortocircuitos y sobrecargas eléctricas.
Elementos clave de la protección pasiva
Las protecciones pasivas desempeñan un papel fundamental. El cumplimiento de normas y regulaciones establece estándares mínimos que garantizan la seguridad de las personas y los activos en una instalación. Por ejemplo, el cumplimiento de la normativa IEC 61439 y otros estándares similares garantiza una serie de requisitos específicos, como distancias de aislamiento y límites de calentamiento, que deben respetarse en los cuadros eléctricos.
La compartimentación es una estrategia clave en la protección pasiva. Implica la incorporación de paneles o pantallas internas para limitar el acceso a partes activas peligrosas. Esta barrera física reduce significativamente el riesgo de contacto eléctrico directo, lo que aumenta la seguridad de las personas que trabajan en la instalación.
Otro elemento importante es el régimen de neutro o puesta a tierra. Este enfoque se utiliza principalmente en entornos críticos donde la continuidad del servicio es esencial, como hospitales, centros de procesamiento de datos e industrias.
Protección de las personas: contactos eléctricos y arcos eléctricos
La seguridad eléctrica no se limita a proteger la instalación; también se trata de proteger a las personas que trabajan en ella. Los riesgos para los operarios incluyen contactos eléctricos directos e indirectos, así como la exposición a arcos eléctricos.
- Contactos eléctricos: Los contactos eléctricos directos ocurren cuando una persona entra en contacto con partes activas de la instalación. Los contactos eléctricos indirectos son menos evidentes y se producen cuando una persona entra en contacto con masas metálicas que están bajo tensión debido a un accidente. La protección activa contra estos riesgos se logra mediante interruptores diferenciales que detectan corrientes de fuga a tierra y desconectan el circuito de manera segura.
- Arcos eléctricos: Los arcos eléctricos son fenómenos peligrosos que pueden ocurrir en cuadros eléctricos y celdas de media tensión. Se producen cuando la tensión entre dos puntos es lo suficientemente alta como para ionizar el aire y permitir que la corriente eléctrica circule a través de él. Los arcos eléctricos pueden generar altas temperaturas y presiones, lo que los convierte en un riesgo grave. Para abordar este riesgo, se utilizan protecciones especializadas que detectan y eliminan los arcos eléctricos de inmediato, como son los Equipo de detección de arco eléctrico, PowerLogic A125.
Mantenimiento y seguridad
El mantenimiento regular es esencial para prevenir problemas en una instalación eléctrica. Sin embargo, las tareas de mantenimiento pueden conllevar riesgos asociados. Por lo tanto, es crucial seguir reglas de seguridad estrictas al realizar estas operaciones. Estas “reglas de oro” son:
- La evaluación de riesgos específicos
- Reuniones previas a la operación
- Aplicación de enclavamientos y bloqueos adecuados
- Uso de equipo de protección personal
- Formación en seguridad y riesgo eléctrico
A todo ello tenemos que sumarle la disponibilidad de la información de la instalación, es decir, saber cómo es, dónde está conectada, qué nos vamos a encontrar y muchas veces no disponemos de esta información. Por eso este conocimiento de la instalación debe evolucionar acorde a las tecnologías y cada vez más se está instaurando la gestión de tareas de mantenimiento a través de herramientas digitales, como EcoStruxure Power Facility Expert Operations.
Integrar la tecnología para una mayor seguridad
Conforme las tecnologías avanzan, estas nos pueden ayudar a realizar las operaciones peligrosas con mayor seguridad. Por ejemplo, con la realidad aumentada, que permite a los operarios acceder a información detallada de la instalación sin necesidad de abrir cuadros eléctricos, con soluciones como EcoStruxure Augmented Operator Advisor 3D. También puede proporcionar alertas en tiempo real sobre áreas peligrosas y ofrecer instrucciones paso a paso para el mantenimiento seguro, y todo ello a través de una tablet u otro dispositivo para el operario.
Incorporando tecnologías a los cuadros, celdas y otros elementos a través de la sensórica, podemos obtener una monitorización en tiempo real, tanto de parámetros estándar como son temperatura, humedad y corriente como de otros más innovadores como es el “índice de calidad del aire” en interior de cuadro, a través de los innovadores sensores PowerLogic HeatTag que detectan sobrecalentamientos anormales de cables eléctricos y permiten avanzarse a las condiciones de inicio de incendio antes de que se produzcan daños en el interior del cuadro, los cuales aportan un extra de seguridad hasta ahora desconocido en el sector. Los sensores transmiten datos a un sistema central, lo que permite supervisar el estado de la instalación sin exponer a los operarios a riesgos.
Y finalmente, otro gran aliado es el Gemelo Digital, una réplica digital de la instalación que se utiliza para supervisar su estado en tiempo real. Almacena información importante y facilita las operaciones de mantenimiento.
Realidad aumentada, sensórica, gemelo digital… Todas estas tecnologías se integran en nuestra plataforma EcoStruxure Power, que ayuda a garantizar la seguridad en las instalaciones eléctricas.
La seguridad eléctrica es esencial en la gestión de instalaciones eléctricas. Comprender y aplicar prácticas de seguridad pasivas y activas es fundamental para proteger a las personas y los activos. La tecnología, incluida la realidad aumentada, la sensorización y los gemelos digitales, está desempeñando un papel cada vez más importante en la mejora de la seguridad eléctrica. En Schneider Electric, estamos comprometidos a proporcionar soluciones que garanticen la seguridad en las instalaciones eléctricas y a avanzar hacia un mundo más seguro y sostenible.